En el mundo del marketing, para comunicarnos con nuestros clientes potenciales, tenemos múltiples maneras de hacerlo. Una de las más importantes y recurrentes es el Email Marketing.
Tener una buena lista para la distribución y saber a quién va dirigido, es uno de los activos más poderosos del Email Marketing. Por este motivo se debe cuidar desde el principio.
Hacer una lista de distribución no es, ni mucho menos, introducir correos a destajo y mandar de manera indiscriminada. Tenemos unas reglas legales y debemos seguirlas. Son:
- La LOPD, o Ley Orgánica de Protección de Datos. Viene legislada por la Agencia Española de Protección de Datos. Regula el derecho de la información de las personas físicas.
- La LSSI, o Ley de la Sociedades de la Información y Comercio Electrónico. La LSSI no distingue entre personas físicas o jurídicas y regula la sociedad de la información.
Aunque no nos demos cuenta, gracias a estas leyes, nuestra bandeja de entrada de correo electrónico no está saturada con correos de los cuales no sabemos su procedencia o empresas de las que nunca habíamos oído hablar.
Tanto la LOPD como la LSSI evitan día tras día la sobreexposición de nuestro correo electrónico. De esta manera evitamos SPAM u otros correos de poco o ningún interés.
Para que nuestros correos sean efectivos y no acaben perdiéndose, existen unas reglas. Veamos algunas:
Reglas del Email Marketing
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Notificar a la Agencia Española de Protección de Datos la existencia de nuestro fichero.
Lo primero que debemos hacer antes de nada, es inscribir nuestro fichero en la AEPD (Agencia Española de Protección de Datos).
Esto es requisito indispensable para que más tarde, puedas gestionar la información de las personas y contactar con ellas a través, en este caso, del email.
No solo el tratamiento de datos es lo que le interesa a la AEPD. Las BBDD generadas con todos los datos personales también se adjuntarán y se enviarán para su posterior análisis por la agencia.
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El derecho a la información
Debemos saber que dicen las leyes al respecto del tratamiento de la información personal.
Es de vital importancia saber cómo funcionan las leyes y cómo saber utilizarlas y respetarlas, ya que no nos interesa que nuestras campañas de Email Marketing sean catalogadas como SPAM. Ser descartados nada más empezar sería un fracaso.
«Artículo 5. Derecho de información en la recogida de datos”
- Los interesados a los que se soliciten datos personales deberán ser previamente informados de modo expreso, preciso e inequívoco:
- a) De la existencia de un fichero o tratamiento de datos de carácter personal, de la finalidad de la recogida de éstos y de los destinatarios de la información.
- b) Del carácter obligatorio o facultativo de su respuesta a las preguntas que les sean planteadas.
- c) De las consecuencias de la obtención de los datos o de la negativa a suministrarlos.
- d) De la posibilidad de ejercitar los derechos de acceso, rectificación, cancelación y oposición.
- e) De la identidad y dirección del responsable del tratamiento o, en su caso, de su representante. Cuando el responsable del tratamiento no esté establecido en el territorio de la Unión Europea y utilice en el tratamiento de datos medios situados en territorio español, deberá designar, salvo que tales medios se utilicen con fines de tránsito, un representante en España, sin perjuicio de las acciones que pudieran emprenderse contra el propio responsable del tratamiento.
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El consentimiento del marketing legal
¿Cuál es la diferencia entre un correo en tu bandeja de entrada o en la de SPAM? Exacto, el consentimiento del usuario.
Esto significa que cada usuario o futuro cliente, tiene que dar su autorización para recibir, sean boletines informativos o correos publicitarios.
Entonces, aquí el consentimiento requiere especial relevancia, ya que la voluntad del usuario para recibir información tiene que existir de forma fehaciente.
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Darse de baja de las listas
Este aspecto está contemplado en el artículo 5 anteriormente citado de la LOPD, donde podemos clarificar que todo usuario es libre de darse de baja de cualquier campaña que nosotros fomentemos.
Por este mismo motivo nosotros no debemos provocar ese tipo de comportamientos con bombardeos masivos ni con informaciones irrelevantes.
La información tiene que ser justo la necesaria para: causar el mayor interés entre los usuarios y el número menor de bajas posible.